La posibilidad que Carlos Greco sea designado subsecretario en el área de seguridad del Municipio de Quilmes generó revuelo en el ámbito policial y político de la ciudad. Decir que el comisario Greco tiene ruido es poco, Greco es un sonajero que prende las luces de alarma por sus actuaciones precedentes.
En primer lugar, y para estar a tono con los tiempos actuales de la noticia, hay que mencionar que Carlos Greco, era el titular de la DDI de Quilmes, cuando se ejecutó el triple crimen de General Rodríguez, por el cual se encarceló a los hermanos Lanatta y a Schillaci, quienes según numerosas investigaciones, habrían guardado a los muertos en un freezer en la ciudad de Quilmes antes de “tirarlos” en General Rodríguez.
Por otra parte, el caso que lo catapultó a la fama es el del secuestro del empresario Leonardo Bergara, un escándalo que aún sigue boyando por la justica. Los principales actores en la resolución del caso fueron Greco, y el Juez Federal Luis Armella, que implicaron en el secuestro a integrantes de la bonaerense: Juan Vicente Cardozo y Víctor Ariel Vega, quienes casualmente investigaban las conexiones locales del Triple Crimen, y a Roque Lujan, quien estaba al frente de la Distrital de Berazategui y había comandado el mayor secuestro de droga en la historia de esa localidad. A pesar de terminar con las carreras policiales de los supuestos implicados, la Justica siguió investigando, y en septiembre del 2014, el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de La Plata absolvió a los acusados del secuestro y ordenó investigar al Juez Armella y a Greco.
En una investigación que tuvo enorme repercusión en medios nacionales, nuestro colega de Berazategui, Alberto Moya, hizo público las actividades ilícitas de los familiares directos del entonces Comisario, fundamentalmente las de su hermano Aurelio.
No obstante a todo, Greco fue rescatado por el Jefe de la bonaerense, Hugo Matzkin, y el ministro de Seguridad, Alejandro Granados, que lo convirtieron en superintendente de Seguridad de Zona Oeste. Allí no le fue mucho mejor públicamente, ya que fue denunciado por alquilar patrulleros que no funcionaban para ser utilizados como “espanta-chorros”.
Como si esto no alcanzara como antecedentes, al menos cuestionables, dentro de la fuerza se califica al “petiso”, como el más reciente “cajero de Espinoza” (Intendente de La Matanza). Para no exagerar con las tristes coincidencias, digamos que la Intendenta actual de La Matanza, Verónica Magario, estuvo a punto de nombrarlo secretario de Seguridad del municipio, hasta que se decidió por el propio Matzkin.
Para cerrar, digamos que según fuentes policiales Greco se lo vincula con un grupo de policías identificado con “Smith”. El comisario mayor retirado Claudio Smith, volvió recientemente a las páginas de los diarios, por entregar 80 mil dólares falsos en una de las sedes del Banco Nación.
(Fuente: El Termómetro)
